Kii’wik, a cargo del chef Pedro Evia, es ideal para comenzar el día, pues hasta coplas se han escrito de sus exquisitos desayunos. Este café cuenta con una panadería y un restaurante hermano, Kuuk, que se ha convertido en uno de los referentes de la cocina contemporánea del estado. Para continuar, Te Extraño, Extraño: la melancólica y hermosa propuesta de Joaquín Cardoso y Sofía Cortina (quien acaba de ganar el Premio a la Mejor Repostera de Latinoamérica) se encuentra dentro de Lagalá, un espectacular concept store de luminosos y amplios espacios con pisos de mosaico ubicado al interior de una bellísima casa de esas que evoca la mente cuando se piensa en Mérida. Aquí también se encuentra Terraza 56, un sitio de programación cultural y galerías, y la boutique IMOX. Micaela Mar y Leña sigue siendo, años después de su apertura, uno de los indiscutibles favoritos tanto de locales como de visitantes. Un ambiente cálido y acogedor recibe al comensal con un menú que conjuga las brasas y el mar.
Durante 2020 y lo que va de este año no solo ha habido grandes lugares que resistieron estoicamente los embates de la pandemia, sino también varios valientes que nacieron y se consolidaron como propuestas de enorme calidad. Una de ellas es Cuna, del chef Maycoll Calderón. Ubicado en el Hotel Wayam, es un espacio abierto, luminoso y fresco que aprovecha el clima tropical de Mérida en lugar de intentar disiparlo. La comida es deliciosa, con muchos elementos marítimos y frutales.
El indiscutible nuevo cool kid meridense es Salón Gallos, centro de reunión obligado para quienes buscan una cerveza o un trago para calmar el calor yucateco. En esta amplísima propiedad se fusionan cantina, wine bar, SALÓN (una galería que recientemente trabajó en colaboración con joségarcía ,mx) y un cine. Este es un sitio donde cultura y gastronomía se unen en una de las más naturales mezclas posibles.
Y para los que disfrutan de la cerveza, Yucatán cuenta con varias opciones locales reconocidas y cada vez mejores, como Ceiba. Por otro lado, Hermana República es el restaurante de la Cervecería Patito, donde se pueden probar todas sus variedades en un espectacular espacio diseñado por Taller Mexicano de Arquitectura.
El extra, el primer speakeasy meridense: Malahat es un bar pequeñito escondido detrás de Apoala —un restaurante oaxaqueño en el Parque Santa Lucía— donde los protagonistas son deliciosos cocteles con una de las mejores propuestas de mixología de la ciudad. Por su parte, Apoala ha sabido lucirse fuera de su ciudad natal en medio de otro de los centros culinarios más importantes del país, mezclando de forma exquisita los sabores de Oaxaca con los de Yucatán. La presencia cercana de estos dos sitios es importante, ya que nos muestra que más allá del famoso Paseo de Montejo, el Parque de Santa Lucía en el centro de la ciudad también es un gran spot gastronómico. En los alrededores de esta pequeña plaza encontrarás desde restaurantes de comida típica mexicana de varias regiones hasta italianos (La Tratto) y argentinos (La Recova), entre otros de diversos orígenes. Te sorprenderá descubrir que en los límites de este cuadrante al aire libre —que se ha convertido en el sitio ideal para ver caer la noche— se dan cita los sabores más cosmopolitas.