4) Tomando en cuenta lo anterior, calcula primero cuánto te costarán las cosas más caras: boletos, traslado desde y hacia el aeropuerto, hotel, seguro de viajes, comidas y salidas.
5) Guarda un porcentaje de dinero para contingencias: vacunas, hospital o medicinas, así como para visas y otros trámites.
6) Baja toda la información a una app como Wallet para identificar si el costo total está dentro de tus posibilidades o si te has pasado de la raya.
7) En caso de que te haya salido más caro de lo planeado, revisa tus opciones: puedes pensar a qué tarjetas cargar ciertos gastos más altos (como hotel y boletos) y cuáles destinarás a los costos diarios, o bien revisar en tu presupuesto de qué puedes prescindir para bajarlo.
8) Finalmente, reserva: cuanto más tengas ya cotizado y pagado de antemano, menor será la necesidad de recurrir a compras de último minuto que pueden salirte más caras.
Recuerda siempre avisar a tu banco o proveedor de tarjeta de crédito sobre tus planes de viaje para que no te bloqueen la tarjeta en medio de este y viajes tranquilo, sabiendo que todo lo bueno te espera en tu destino.