Ya nadie duda del cambio climático y del impacto que este tiene sobre el planeta y sus recursos. Ser conscientes sobre cómo nos desplazamos por el mundo sí hace la diferencia. 

Estas son algunas recomendaciones: 

1. Al volar, colabora con los programas de compensación de emisiones de carbono de la aerolínea. 
2. Una vez en el destino, planea rutas que te permitan llegar caminando de un lugar a otro o, aún más divertido, recorre el pueblo o la ciudad en una bicicleta o un scooter. 
3. Para llegar a los atractivos turísticos más lejanos, utiliza el transporte público, ya sea autobuses o trenes, o reserva una visita o un recorrido con alguna empresa local, todavía mejor si cuenta con un vehículo eléctrico. 
4. Elige probar los sabores locales en los comercios pequeños. Además de conocer la cultura del lugar a través de su gastronomía, impactas directamente en la economía de la comunidad.
5. Opta por alojamientos respetuosos con el entorno. Para ello, solo te tomará un poco de tiempo buscar o preguntar por sus programas sostenibles para conservar el agua, evitar plásticos de un solo uso o dar una segunda vida a los residuos de jabón, por dar algunos ejemplos. Si puedes hacer esta búsqueda antes de llegar a tu destino, ¡será mejor para aprovechar al máximo tu estancia! 
6. Escoge alojarte en la casa de algún residente; además de apoyar su emprendimiento, te puede contar los secretos de su pueblo o ciudad y compartirte los mejores consejos sobre los sitios a conocer.  
7. Busca actividades que, en sí mismas, sean una opción sustentable y conectada con su comunidad, como caminatas con guías locales, experiencias gastronómicas tradicionales, etcétera.