A la carta
Puro sabor
en Costa Rica
Por: Ivett Rangel / Fotos: Cortesía Instituto Costarricense de Turismo
Ingredientes frescos, combinaciones sencillas y sabor casero distinguen a la gastronomía tica, conformada por influencias europeas, africanas e indígenas. Sus sabores, las historias que cuentan y sus tradiciones bien valen un viaje.
Aún no ha llegado el avión a San José, la capital de Costa Rica, y ya se escucha el “pura vida” por doquier. Y es que esta expresión, con la que se reconoce el espíritu alegre de los nacidos en este país de Centroamérica, sirve por igual para decir hola y adiós, gracias o que todo está bien. El “pura vida”, además de transmitir buena vibra, también sirve para elogiar los sabores de su gastronomía, que es un auténtico reflejo de la cultura y biodiversidad.
Estrellas emplatadas
Como en todo país, en tierra tica hay platillos emblemáticos. Aquí compartimos una selección básica para quien viaja por primera vez a Costa Rica.
El gallo pinto es el plato emblema de la cocina costarricense. Es un desayuno que mezcla arroz y frijoles con cebolla, pimiento y cilantro, y se acompaña con huevo, plátano maduro y natilla (una crema fresca local). Según la zona, puede haber alguna variación. Lo que nunca cambia es el buen gusto que deja y que permite empezar el día con la esencia y energía del “pura vida”.
El casado, por su parte, es el almuerzo tradicional. En un plato se sirve arroz, frijoles, ensalada, plátano frito y una proteína: carne, pollo o pescado. Es la opción saludable y sustanciosa para probar en cualquier “soda” (la versión tica de las fondas o las cocinas económicas).
El ceviche tico lleva pescado crudo (como corvina) marinado en jugo de limón y mezclado con cebolla, chile dulce, cilantro y un toque de ajo. Y aunque se crea que ya lo conocemos porque se ha probado en otros rincones del mundo, la versión de Costa Rica se distingue por una frescura sorprendente.
El chifrijo se elabora con frijoles rojos, chicharrón de cerdo, arroz y pico de gallo. En algunos casos se agrega aguacate. Esta es la opción para satisfacer cualquier antojo, sin importar la hora del día, y se recomienda acompañarlo con totopos.
Para los amantes de los caldos está la olla de carne, una sopa que incluye trozos de carne de res y una variedad de vegetales, como yuca, ñame, papa, zanahoria y elote. Este guisado es uno de los favoritos en reuniones familiares o para fines de semana.
Y nada más refrescante que el Churchill, un postre-bebida en el que se combina hielo raspado con jarabe de cola, leche condensada, helado y, a veces, frutas frescas.
Como en toda Latinoamérica
el ceviche está presente en Costa Rica y tiene su toque propio, como el uso de chile dulce, cilantro, un poco de ajo y los infaltables plátanos crujientes.
Con mucho gusto
Costa Rica es un país de café, y su historia se remonta al siglo XVIII, cuando fueron introducidas las primeras plantas. El suelo volcánico, rico en minerales, el clima fresco de montaña y el campo sombreado crearon las condiciones ideales para el cultivo, que pronto se convirtió en el principal producto de exportación y en un tesoro de la cultura local.
Costa Rica cuenta con siete regiones productoras, distribuidas entre las zonas bajas, a
menos de 1,000 metros sobre el nivel del mar, donde el café es más liviano, y las zonas altas, por encima de los 1,200 metros, donde el café es más ácido y aromático.
Una vez sabido esto, se entiende el porqué los ticos son amantes del café. Y el café chorreado es la manera tradicional de tomarlo en Costa Rica, sobre todo para conservar sus propiedades. Solo hay que pedirlo así para ver que se prepara con sumo cuidado, utilizando una bolsa larga de algodón en la que se coloca el café molido y luego se le agrega agua a una temperatura específica. De este modo, la infusión chorrea directamente en la taza.
El casado
es un almuerzo tradicional, saludable y accesible en las “sodas” o fondas de Costa Rica; combina arroz, frijoles, ensalada, plátano frito y una proteína.
De sorbo en sorbo
Otra bebida que sí o sí hay que probar es la pipa fría, como se le conoce al agua de coco, una delicia refrescante luego de recorrer alguno de los muchos parques nacionales por los que Costa Rica es conocida como la joya verde de América Central. Pero si se busca algo con alcohol, lo más popular es el guaro, una bebida hecha con caña de azúcar. Es similar al aguardiente, pero la palabra puede referirse a otros tipos de alcohol.
La cocina tica
conformada por influencias europeas, africanas e indígenas, es una combinación de frescura, sabor casero y “pura vida”.
Estos platillos representan solo una parte –quizás la más emblemática– de la gastronomía costarricense, la cual valora los ingredientes frescos, las combinaciones sencillas y el sabor casero. Sin embargo, para profundizar en la diversidad culinaria de sus regiones y sus distintas comunidades, nada como viajar, explorar, preguntar y seguir probando.
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