Casas Grandes
Aventura, historia y naturaleza
Invita a tus amigos a explorar las dunas, zonas arqueológicas y paisajes increíbles en el noroeste de Chihuahua.
Si tú y tus amigos buscan una aventura que incluya paisajes sorprendentes, arqueología y actividades extremas, Chihuahua es el destino ideal. Desde dunas para subir la adrenalina a tope, y pasando por zonas arqueológicas milenarias y paisajes boscosos, este recorrido tiene un poco de todo para ti.
Arena y adrenalina
A 50 kilómetros al sur de Ciudad Juárez, los médanos de Samalayuca son un mar de arena dorada que se extiende por más de 150 kilómetros cuadrados y ofrece experiencias extremas, como sandboarding, motocross o recorridos en cuatrimotos que se pueden rentar en las inmediaciones. Allí también encontrarán los petrograbados de la tribu mogollón, con más de 1,500 años de antigüedad. La combinación perfecta entre aventura y cultura en el desierto chihuahuense.
Para llegar desde Ciudad Juárez, hay que tomar la Carretera Federal 45 hacia Chihuahua, hasta encontrar la desviación hacia los médanos. No olviden llevar suficiente agua y protector solar.
En tu viaje por Chihuahua
Un pueblo taciturno
Este viaje entre amigos continúa en Casas Grandes. Luego de instalarse en alguno de los hospedajes de este Pueblo Mágico, pueden dedicar el resto de la tarde a recorrer sin prisas el templo de San Antonio de Padua, la Plaza Principal, el Palacio Municipal y el Museo Casa de Carranza.
Al día siguiente y a cinco minutos del pueblo en automóvil, Paquimé los espera para seguir las huellas de una civilización prehispánica muy distinta a las que solemos encontrar en otras partes de México.
Paquimé fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y fue hogar de una civilización que floreció entre el 900 y el 1200 d.C. A diferencia de las culturas prehispánicas más conocidas de México, esta antigua civilización no pertenece completamente a la tradición mesoamericana ni a la de los pueblos del suroeste de Estados Unidos. La arquitectura y los hallazgos de Paquimé reflejan el intercambio cultural con los pueblos del desierto y las civilizaciones del centro y sur de México.
Mientras que la mayoría de las ciudades mesoamericanas utilizaban piedra en sus construcciones, Paquimé se construyó con adobe. Además, tenía edificaciones de varios pisos interconectados, similares a las viviendas de los pueblos indígenas del suroeste de Estados Unidos, como los anasazi y los hopis. También contaba con un complejo sistema de canales para distribuir agua, cisternas y drenajes, algo poco común en otras culturas del norte de México de su tiempo.
No dejen de visitar el Museo de las Culturas del Norte, a un lado de la zona arqueológica, para entender mejor la grandeza de esta civilización y admirar una de las mejores colecciones arqueológicas del país. Pongan especial atención a su tradición cerámica.
La zona arqueológica de Paquimé
Valle de las Cuevas
La opción más recomendable para conocer el Valle de las Cuevas es hacerlo con un guía, pero si quieren hacerlo a su ritmo, tomen la carretera de Casas Grandes a Colonia Juárez y sigan los señalamientos. Este trayecto lleva aproximadamente 15 kilómetros y pueden hacer una parada en la comunidad mormona de Colonia Juárez, conocida por su imponente arquitectura victoriana de estilo anglosajón, así como por sus lácteos y conservas artesanales.
Continúen hacia ejido Ignacio Zaragoza y recorran tres kilómetros más hacia el Valle de las Cuevas. Sabrán que han llegado cuando comiencen a internarse en un bosque con barrancas y formaciones rocosas fuera de lo común. En estos paisajes habitaron los primeros nómadas de la región, mucho antes del esplendor de Paquimé.
Aunque hay infinidad de cuevas y podrían pasar días enteros recorriendo el valle, las más recomendables son la cueva del Rincón, donde se encontraron herramientas rudimentarias y tiene una vista impresionante; la cueva de la Olla, que guarda en su interior una gran estructura de almacenamiento de granos, y la cueva del Corral, en donde se hallaron restos óseos de animales y herramientas de piedra para cazar.
Viajar con amigos al noroeste de Chihuahua
Este viaje es solo una probadita del noroeste de Chihuahua. Si les queda tiempo, no pierdan la oportunidad de visitar el pueblo de Mata Ortiz, cuya cerámica, famosa a nivel mundial e inspirada en la paquimeíta, ha sido expuesta en museos y galerías de todo el mundo, como el Louvre de París o el Smithsonian en Washington D.C. También pueden agregar a su itinerario el cañón de Nacapule, la laguna Fierro o la hacienda San Diego.